LA TRILLA

 

 

        

 

 La época estival en la que la actividad agrícola tendría mayor incidencia en las relaciones sociales, pues llegado el momento de la recolección los caminos se convertían en un constante "ir y venir" de carretas, que en grupos abandonaban la villa al atardecer, para, después de pernoctar en los rastrojos, acarrear las mieses desde tierras tan distantes como Navagamellas, los Cabadales, …  Las eras, dada la costumbre de realizar las tareas  de la trilla todos los agricultores en el mismo lugar: los ejidos, se convertían en el centro de la villa mientras el tiempo de la recolección. Lo que daba lugar a veces a alguna disputa; pero siempre, a una importante solidaridad, a la práctica de diversas costumbres y muchas anécdotas. La tarea de la trilla se terminaba a las cinco de la tarde, "hora de suelta" ,siendo entonces cuando los trilliques de mayor edad tomaban a su cargo las yeguadas para conducirlas a la Dehesa. Los adultos, tras una dura jornada, buscaban un momento de holganza en la taberna, hasta que el sonido de un cuerno les recordaba que era la hora de cenar.

DÁMASO BARRANCO MORENO

 

 

LA TRILLA

 La trilla de las mieses tenía lugar en la era, un espacio de tierra limpia y firme, en Villenueva: el Ejido, las eras de Marin, San Antón, Praocurato.

 

  Aparvar. Hacer parva, disponer la mies para trillarla, extendiéndola de modo que forme un circulo en la era.

  Trillar. quebrantar la mies tendida en la era y separar el grano de la paja con el pisoteo de las caballerías, con el trillo o con ambas cosas.

El trillador va subido encima del trillo de pie o sentado sobre una pequeña silla y lleva las riendas de las caballerías que tiran del trillo. Para separar el grano de la paja, era necesario un día dando vueltas y más vueltas alrededor de la parva.

Las labores típicas de la trilla se prolongaban durante bastantes jornadas. El trabajo en sí no era muy agotador, pero se convertía en una labor muy dura por la acción de los rigores propios de los calores estivales.

 

 

 

  Aventar o ablentar. Echar al viento alguna cosa. Se dice comúnmente de los granos que se limpian en la era.

Cuando se acababa de trillar, se recogía la mies trillada formando un montón y a continuación se ablentaba. Había que lanzar al aire con la orca o bieldo toda la mies para separar lo más posible el grano de la paja en una primera operación.

 Apalear. Aventar y remover los granos con la pala de madera de un sitio a otro.

 Abalear. Limpiar el trigo, la cebada, el centeno, las garrobas y la avena, al tiempo de aventarlo, separando con una escoba el grano de las granzas ( espigas, pajas gruesas, excrementos secos, ctr.)

 Acribar. Limpiar por medio de la criba la paja, el grano y otras semillas. Por la criba debía pasar todo el montón de mieses previamente trilladas y ablendadas. Era una labor que requería bastante esfuerzo.

 Amuelar. Recoger el trigo y resto de cereales en la era. Para ello se formaba el muelo: el montón en que se recogía el grano después de limpiarlo en la era.

 Ensacar. Rellenar en sacos el conjunto de granos que componen el muelo para llevarlo al granero.

 

  *El grano se guardaba  en Villanueva normalmente en el sobrado,donde estaban los graneros.

 La paja, cuya caña no superara los diez centímetros después de la trilla, se metía en el pajar, ( parte de la casilla ) y se empleaba a lo largo del año para alimentación del ganado y para camas de animales como vacas, burros, cerdos, gallinas, cabras, ectra.

  *A los carros se les ponía unos estacones largos y una red alrededor para llevar de una vez gran cantidad de paja hasta el pajar.

 El estiércol que se utilizaba para abonar las tierras se conseguía a través de la paja que se echaba en el suelo de cuadras y cobertizos como camas de animales.

  *Por su parte, el grano permanecía en el granero y se destinaba bien a la molienda de harina para hacer pan, para alimentación de los animales, para semillas de cara a la nueva siembra o bien para venderlo .